Todo esto me fuè aconfiado gratuitamente  pero  como el Señor de los talentos yo tenìa el deber de trabajar para aumentarlos, hasta el regreso del Señor.(Mt. 25,14-30) (Paràbola de los talentos).
  A  cada ser humano, el Señor la ha regalado talentos, no  para enterrarlos, serìa egoìsmo no querer compartirlos, debemos ponerlos al servecio de los demàs y de la Iglesia de Jesùs, y  con ellos trabajar por
si Reino..
  La Iglesia por  medio de sus sacerdotes y de sus fieles comprometidos continùa sembrando el Evangelio de Jesùs en el gran campo que es mundo.
Jesùs me necesia; nesesita mis ojos, mis oìdos, mi voz, mis manos, mis pies,necesita mi corazòn, mi alma,mi mente; Jesùs nos necesita a todos para seguir sembrando su Evangelio .Tambièn te necesita a ti querido hermano que lees estas pàginas;tal vez estas trabajando para el Reino de los cielos;tal vez te falta decisiòn y coraje;sùmate a nosotsros, es una tarea apasionante. y recibiràs del Señor cien veaces màs y obatendràs como herencia  la Vida Eterna(Mt.19,29) . Y saborear aquì en la tierra la dicha de saber que nuestros nombres   estàn escritos en el Cielo (Lc.10,20).